El casal de Can Monroig está situado en el número 22 de la calle Can Valella de Inca en la isla de Mallorca, donde en época medieval se ubicaba el “Call” o barrio judío.
Esta casa fue adquirida en el año 2002 por sus actuales propietarios Marie-Noëlle Ginard Féron y Robert López Hinton que entre el año 2004 y el 2009 llevaron a cabo una importante restauración de la misma durante la cual salieron a la luz numerosos elementos arquitectónicos que evidenciaron su pasado medieval.
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Fachada de Can Monroig antes de la restauración
No fue hasta el año 2012 en que sus propietarios empezaron a relacionar algunos restos hallados durante la reforma de la casa, como los depósitos de piedra o el horno, con otros similares enontrados en Sinagogas peninsulares cuando se interesaron por el pasado judío del barrio y estudiaron las características propias de las sinagogas y espacios comunitarios que compratían los judíos del medievo.
No es necesario decir que la casa tal como se conserva en la actualidad es ya de por sí un edificio peculiar e interesante pero el hecho de que esté situado en pleno barrio judío de Inca y que sea una casa de origen medieval hace suponer que podemos estar ante la sede de alguna o varias instituciones judías.
El “call” de Inca
La creación del barrio judío de Inca en el siglo XIV fue consecuencia directa del aumento de la violencia y de los numerosos altercados que amenazaban la convivencia pacífica entre las comunidades judía y cristiana. Esta situación se hizo decididamente insostenible a partir de 1346 en que se daban habitualmente acciones violentas y coacciones de tipo religioso por parte de los cristianos hacia la comunidad judía de Inca. Estos hechos provocaron que el Rey Pedro IV de Aragón ordenase la creación de un barrio en el cual los judíos viviesen recluidos para protegerse de las amenazas de los cristianos.
Hasta ahora, tan solo tenemos documentada la creación del “Call” en el año 1372, su perímetro, las dos puertas de entrada, la existencia de la sinagoga, el cementerio y la carnicería. El estudio de la arquitectura de Can Monroig, la comparativa con otros edificios, tanto de la corona de Aragón como de la corona de Castilla, así como el estudio del paisaje urbano, nos permiten formular la hipótesis de que la sinagoga medieval de Inca se ubicase en Can Monroig.
Horno hallado durante la restauración
Es interesante apuntar que la sinagoga era no solo un lugar de culto, sino también un lugar de reunión, algo así como un centro cívico que incluía la entrada a través de un patio, la sala de oración, la zona de las mujeres, El Mikveh, la escuela talmúdica, almacenes para el vino y el aceite, un horno, etc.
Coincidencias Arquitectónicas de Can Monroig con los elementos propios de una sinagoga medieval
“Las prescripciones rabínicas recogidas en el Talmud y la Misná regulan la disposición de su espacio interior, que en la Edad Media giraba en torno a cinco ejes fundamentales: el arca o armario de la Toráh, la tribuna, la zona de oración, el lugar reservado a las mujeres y niños y la azará o patio de entrada (…) Tras cruzar el umbral de la puerta o puertas exteriores se accedía directamente a la azará o patio de la sinagoga, un atrio con una pila de agua para que los varones se lavasen las manos (abluciones de purificación) antes de entrar a la sala de oración. Las mujeres accedían al matroneo por otra puerta diferente a las de los varones. En las sinagogas había un espacio separado de los varones, llamado matroneo, donde las mujeres y los niños menores de edad seguían la oración y culto de los mayores.” *(1)
El espacio y su emplazamiento
“En general dos de sus muros dan a la calle y un tercero coincide con un callejón que conduce al patio interior, el cual, a modo de atrio lateral, resulta imprescindible: en él se depositan los zapatos en los días de ayuno, se cubre de enramadas para la fiesta de las Cabañuelas (Sukot) y sirve de acceso a otras dependencias de la comunidad judía, aunque para acceder a la estancia de las mujeres se precisan itinerarios distintos con el fin de que no coincidan con los hombres en el patio. La presencia y número de los servicios anejos a la comunidad variará según los lugares y la definición jurídica, ya que la denominación genérica como sinagoga es una simplificación historiográfica ante la diversidad propia de la jurisprudencia rabínica Dentro, la estancia contiene otras dos puertas, incluida la que da acceso a las mujeres .” *(4)
“Exceptuando casos contados y concretos, las dimensiones de los edificios son muy parecidas y reducidas. Todas las sinagogas catalanas bajomedievales conocidas, al igual que prácticamente todas las del conjunto de la Península, son de pequeñas dimensiones, que en alguna ocasión alcanzan un mínimo de 6,78 m. x 6,84 m., si bien en general se sitúan en una anchura de 7 a 9 metros y una longitud de 10 a 15 metros. Esas dimensiones corresponden tanto a los templos de comunidades menores como a los de grandes centros judíos, abarcando todo el conjunto de las sinagogas actualmente conocidas en la antigua Corona de Aragón: Valencia, Palma de Mallorca, Játiva, Tarazona, Calatayud, Seo de Urgel, Cervera, Besalú, Villafranca del Panades, Vic, etc. En definitiva, se trata de espacios aptos para medio centenar de personas sentadas, que suele ser suficiente para acoger a la población masculina asistente a los servicios religiosos.” Descripción de una sinagoga medieval *(4)
El casal de Can Monroig presenta una planta dividida en tres naves paralelas separadas entre sí por arcos de diferentes épocas donde hipotéticamente se situarían la entrada a la sinagoga, zona de oración, el Hejal y la zona de las mujeres.
Posible distribución según Margalida Bernat i Roca (3)
La presencia del agua
“Es habitual que la sinagoga se encuentre en las proximidades de un punto de abastecimiento de agua o el curso de un río, que pueda facilitar no sólo la limpieza del espacio sagrado sino también la de los fieles, ya que determinadas prácticas religiosas como el baño ritual por inmersión suelen vincularse a la sinagoga. Esta es la razón de que a menudo los baños rituales o miqvaot aparezcan en las inmediaciones del edificio o como una dependencia más del conjunto.” *(2)
Pozo en el patio
Como es bien sabido, la presencia de agua en la zona es fundamental a la hora de ubicar una sinagoga ya que era indispensable disponer de una corriente natural de agua para el abastecimiento del Mikveh o baño ritual.
Inca es una ciudad rica en acuíferos, abundantes aguas subterráneas y dispone de varios torrentes que rodean el centro histórico. Basta recordar el topónimo de la calle del agua situada a pocos metros de Can Monroig. A su vez la casa dispone de tres pozos antiguos de filtración o nivel freático hallados durante la reforma.
La entrada a la sinagoga
“En todos los casos la entrada a la sinagoga nunca tiene lugar desde la vía pública sino mediante una discreta puerta hacia al patio.” *(4)
Zona del patio que estuvo cubierta por una bóveda de crucería
En época medieval se entraba al patio de la sinagoga a través de un callejón o androna. Esta entrada probablemente sea el muro actualmente tapiado en la calle de la Rosa que comunica con el patio de Can Monroig.
Desde el patio se accedía al vestíbulo, pasando por el pozo donde los hombres podían hacer sus abluciones de purificación y a continuación a la sala de oración.
Posible sala de oración
La sala de oración donde los hombres realizaban sus rezos podía estar situada en la nave central de Can Monroig, frente al Hejal y mirando hacia el este.
El matroneo
El matroneo es el nombre que recibía la galería desde donde las mujeres seguían los oficios religiosos de la sinagoga desde otra estancia separadas de los hombres. La galería solía situarse en el primer piso en la pared oeste abierta a la sala de oración.
Ventanas y hornacinas con vistas sobre la posible zona de oración
Durante la restauración se hallaron una hornacina y una ventana tapiadas ubicadas en el primer piso con vistas sobre la hipotética sala de oración, actualmente están tapiadas.
El hejal
El templo judío gravita en torno a la correcta orientación hacia Jerusalén, es decir, en la Península Ibérica hacia oriente: uno de sus muros ha de estar exactamente orientado hacia el este. En él se ubica el Hejal, armario u hornacina donde se depositan los rollos de la Tora.
Hornacina escarbada en la pared con paredes de piedra y bóveda
El hejal (Aron Ha-Kodesh) o armario donde se guardaba el Torah o libro sagrado, podía estar escarbado en el muro y por encima del nivel del suelo. Siempre se situaba en la pared este, como es el caso de las dos hornacinas encontradas en la pared de Can Monroig frente a la sala de oración que guardan una gran similitud con otros hallados en Portugal o Francia.
Hejal en la actualidad, hornacina superior e inferior. La puerta cierra un espacio que en su interior es similar al que está debajo.
Mikveh o baño ritual 
La mikve es el espacio donde se realizan los baños depurificación que prescribe el judaísmo. Se trata de un contenedor de agua donde una persona pueda sumergirse completamente,
El habitáculo tenía un contenedor de tamaño variable pero no demasiado grande al que se accedía a través de unas escaleras. El agua que contenía debía proceder de una fuente natural o ser agua corriente filtrada no estancada. Este espacio era utilizado por hombres y mujeres.
Objetivo
Nuestro objetivo es crear un equipo multidisciplinar formado por historiadores, arquitectos, artistas y arqueólogos para estudiar Can Monroig y el barrio judío de Inca. Contamos con el apoyo de los historiadores especializados en el judaismo de las Islas Baleares, Guillem Reus Planels y Margalida Bernat Roca así como de personas relacionadas con el mundo judío, Dani Rotstein, judío americano residente en Mallorca, muy implicado en la divulgación de la historia judía “Xueta” de Mallorca o del arquitecto y artista visual de origen argentino judío Claudio Capellini.
Juntos queremos desarrollar la Hipótesis de Can Monroig como antigua Sinagoga de Inca (1346-1391), investigando en los archivos históricos relacionados, mediante catas arqueológicas en zonas de la casa aún sin estudiar como los pozos del horno, las hornacinas de hejal o la ventana y la hornacina situadas en la zona del matroneo.
La finalidad es dar a conocer el patrimonio cultural de Inca y Mallorca mediante la creación de un centro de investigación ubicado en Can Monroig.
Marie-Noëlle Ginard Feron y Robert López Hinton se dedican a la restauración de casas antiguas en Mallorca, viven y trabajan en Can Monroig donde también mantienen una intensa actividad cultural y artística.
Texto a partir de las publicaciones de Guillem Reus i Planells, doctor en historia del arte por la Universidad autónoma de barcelona
“Apunts per a la història del jueus d’Inca i del seu Call” XVIII Jornades d’Estudis Locals, Inca, 2014.
“El barri jueu d’Inca (Mallorca). Urbanisme i arquitectura del call (1346-1391)” / Els jueus a les Balears. XXXVI Jornades d’Estudis Històrics Locals. Institut d’Estudis Baleàrics, Palma, 2020.
“Calli Judeorum Incha. Una hipòtesi per a la ubicació de la sinagoga medieval inquera” XXI Jornades d’Estudis Locals. Inca (en premsa).
Bibliografía:
*(1)”Indicadores arqueológicos para la identificación de las poblaciones judías medievales hispánicas” Jorge A. Eiroa, Universidad de Murcia
“La sinagoga de Híjar, aciertos y errores” Álvaro Lope Asensio.
* (2) “Lorca, luces de Sefarad”
*(3)”Cementeris i sinagogues de ciutat de Mallorca” Margalida Bernat i Roca
“Los judíos de Inca” Sfarad.es, el portal del judaísmo en España
“Actividades económicas y políticas de los judíos de Baleares en la Baja Edad Media (1229-1391) Volumen I Tesis de Jordi Maíz Chacón.
* (4)”En torno a la identificación de sinagogas medievales: El caso de Tárrega”
Hipotesis-sinagoga-castellano-inglés
Apuntes para la historia de los judíos de Inca
Calli judeorum Incha. Una hipòtesi per a la ubicació de la sinagoga medieval inquera
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